-Papá
-Un genio. Mis ojos son mucho más lindos, cuando se reflejan los tuyos.
(Hubo un lapsus en el que uno de esos amigos celosos vino a sacarme, y cuando me estaba yendo, me vino a buscar de vuelta)
-Esperá!
-Me tengo que ir- (Y yo que no paraba de caminar)
-Tengo que decirte una cosa -(Y caminaba a la par, o trataba)
-Qué?
-Yo quisiera casarme con vos, así cada vez que me levanto al lado tuyo, me puedo enamorar más, día a día. Me hacés un favor?
-Decime.
-Cuando tu novio te diga una cosa así, acordate de mí...
Y dejó de caminar, y yo salí del lugar.